La controversia generada por la clausura de la verdulería La Nueva Luna en Guernica (Presidente Perón), conocida por sus precios accesibles, escaló a un nivel judicial. Tras la denuncia pública del comercio por un cierre "sin motivos", la Municipalidad de Presidente Perón emitió un comunicado oficial detallando las causas de la medida, que incluyen infracciones viales graves y la apertura ilegal del local.
El Motivo Oficial: Carga y Descarga Ilegal y Conflictos con Inspectores
El Municipio informó que la clausura inicial del 8 de octubre en Frutería y verdulería Nueva Luna (Av. Eva Perón 274, Guernica) se debió a la reincidencia en el incumplimiento de las normas de tránsito y las ordenanzas de carga y descarga de mercadería.Según el comunicado, el comercio fue sancionado en reiteradas oportunidades por:
Estacionamiento de camiones de gran porte sobre la Avenida Eva Perón por períodos prolongados.
Provocar serios inconvenientes en el tránsito vehicular y el estacionamiento en una zona neurálgica de Guernica (frente a la estación de tren).
Hacer caso omiso a varias actas de emplazamiento realizadas con anterioridad.
Tratar de forma agresiva a los inspectores municipales, sumado a las quejas formales de otros comerciantes de la zona.
La ubicación de La Nueva Luna, un punto de alto movimiento comercial y vehicular, exige el cumplimiento de la Ordenanza Municipal de Tránsito y Carga, que limita estrictamente los horarios y tipos de vehículos para operar en arterias principales.
Desobediencia Penal: El Agravante de la Ruptura de Faja
El conflicto se judicializó inmediatamente después de la primera clausura. La Municipalidad de Presidente Perón reveló que a pocas horas de aplicar la faja, los responsables del comercio la rompieron y reabrieron al público.
La ruptura de una faja de clausura impuesta por la autoridad es considerada un delito penal de "Desobediencia" o "Violación de Sellos" según el Código Penal argentino. Por esta razón, el Municipio notificó a la Fiscalía de turno, iniciando una causa penal contra los responsables y procediendo a una nueva y definitiva clausura del establecimiento.
Este giro legal transforma la disputa administr
ativa en un caso judicial de mayor envergadura, que requerirá la intervención de la Justicia para su resolución.
